La pinza clásica (o llamada de tipo cangrejo), habitualmente utilizada para “estar por casa”, se está colando poco a poco en los estilismos de las influencers. Este accesorio muy utilizado en los 90 vuelve con fuerza, y al igual que entonces, tiene sus fieles seguidoras y también sus detractoras. Cómodo y versátil incluso para cabellos gruesos o largos, este accesorio ya se posiciona como uno de los más controvertidos de la temporada.
Hace ya algún tiempo que presenciamos una auténtica revolución de los accesorios de pelo. Horquillas, pasadores y diademas no solo se pusieron en primera plana hace unos meses y coparon el street style, además, todos estos accesorios se vistieron de perlas, lazos o piedras preciosas y se convirtieron en auténticas joyas maximalistas que poco tenían que ver con las clásicas diademas de tela o con las horquillas minimalistas que buscan no ser vistas.
las pinzas fueron un éxito en los ’90 que esta primavera vuelven a utilizarse de múltiples formas
Ahora, aunque las diademas (sobre todo las más voluptuosas) y las horquillas joya, como las de Prada o Marc Jacobs, sigan protagonizando infinidad de looks, las influencers de Instagram parecen tener un nuevo accesorio de pelo favorito.
Estas pinzas, al igual que los coleteros, fueron todo un éxito y, como todo vuelve, ahora han reaparecido en los estilismos más casuales, donde se han convertido en una opción para recoger el pelo de forma fácil y a la vez dar un toque urbano al estilismo.
Las formas de utilizarlas son múltiples tal y como se ha demostrado. Pueden servir para recoger el pelo en una coleta, en un moño desenfadado o para crear recogidos dejando varios mechones sueltos.
A favor de estas pinzas se puede decir que no dejan apenas marcas en el pelo, como los coleteros, son cómodas y fáciles de poner. Además, pueden ayudar a crear una armonía de color si se eligen en los mismos tonos que el estilismo, sobre todo en aquellos creados en clave monocolor. Eso sí, para muchos, se trata de uno de los accesorios más complicados de la temporada ya que llaman bastante la atención.
Esta tendencia está muy viva y dispuesta a dar mucho de qué hablar … Y es que no solo llevaremos pinzas con nuestros moños, también las utilizaremos para semirecogidos e incluso como una simple decoración para nuestro pelo.
¿Preparada? ¡Volvemos a los 90!